Normativa promoción interna funcionarios España 2024

Conseguir una plaza como funcionario en España es algo que requiere constancia y trabajo. Preparar una oposición es una tarea encomiable, ya que es necesario ser bastante constante con el estudio y, además, tener un poco de suerte en el examen. En una oposición no compites directamente contra el examen, sino que tendrás que competir contra el resto de candidatos que se presenten. Esto implica que no solo basta con aprobar, sino que también deberás de sacar buena nota si quieres conseguir tu plaza. Si necesitas información sobre Como ser Interino sin Opositar en España en 2024, te lo explicamos aquí.

Una vez conseguida la plaza, tu preparación no tiene que terminarse necesariamente. Esto se debe a que es posible mejorar la plaza conseguida gracias a la promoción interna. En este artículo nos vamos a centrar en esa formación interna y en cómo es la normativa que afecta a los funcionarios.

¿Qué es la promoción interna?

Cuando hablamos de promoción interna nos estamos refiriendo a las plazas disponibles dentro de un proceso selectivo en donde los empleados públicos pueden mejorar sus condiciones laborales. Básicamente, es como si estuviéramos mejorando nuestro puesto de trabajo con más responsabilidades y, por supuesto, mejores condiciones laborales.

Es importante tener en cuenta que no todas las promociones internas siguen los mismos patrones. Además de esto, hay varias formas de promocionar de forma interna como vamos a ver más adelante. Las mejoras que se pueden conseguir con la promoción interna tendrán en cuenta diferentes patrones por parte de los funcionarios, por ejemplo, la antigüedad, el nivel o el grupo en donde desempeñe sus funciones.

¿Cómo es el turno de promoción interna?

La promoción interna de un funcionario se refiere a el ascenso de un funcionario de carrera de un cuerpo o escala dentro de un subgrupo a otro cuerpo o escala de subgrupo superior. Cuando se trata de un personal laboral fijo es un ascenso a una categoría profesional superior. Esta promoción se puede conseguir cuando hay plazas disponibles y, por supuesto, mediante la presentación de una instancia y superar las respectivas pruebas.

De la misma forma que sucede cuando sale un número de plazas determinadas para nuevos funcionarios, lo mismo sucede con las plazas superiores. Evidentemente, las plazas superiores que van quedando vacantes no son elegidas por los nuevos funcionarios. Estas plazas vacantes son rellenadas por aquellos funcionarios que acceden de forma interna a las mismas mediante promoción.

La normativa para la promoción interna de funcionarios en España indica determinados requisitos. Lo primero que se debe tener en cuenta es que es necesario cumplir con los requisitos exigidos para el ingreso en el nuevo cuerpo o escala que se solicita. Esto es similar al requisito básico del funcionariado en donde la propia persona debe de estar capacitada psicológica y físicamente para realizar el trabajo del puesto al que aspira, es decir, plenamente capacitada.

Además de la capacidad para el puesto de trabajo, también es necesario contar con una antigüedad de dos años dentro del propio cuerpo o escala. Este es el requisito más evidente por el cual se hace necesario contar con una promoción interna para poder llegar a dichos puestos de trabajo.

Cuando se trata de una promoción interna a una categoría superior de personal laboral los requisitos que se exigen tienen que ver con los del propio Convenio colectivo de aplicación.

¿Cómo se puede promocionar?

Ahora que ya sabes que se puede promocionar, es importante que sepas cómo se puede hacer. En este caso debemos de distinguir entre cuatro formas diferentes. Podrás promocionar mediante carrera horizontal, vertical, interna horizontal e interna vertical. Veamos cada una por separado.

Cuando se trata de carrera horizontal se trata de la progresión de grado, categoría o escalón en donde no es necesario cambiar de puesto de trabajo. Como funcionario mantendrás tu puesto de trabajo, pero, por así decirlo, tendrías más responsabilidades. Para poder promocionar de esta forma horizontal se tendrán en cuenta varios aspectos, por ejemplo, los trabajos que se han realizado o los conocimientos adquiridos. Así mismo, dependiendo del puesto de trabajo se pueden tener en cuenta otras aptitudes.

En el caso de la carrera vertical, se trata de un ascenso dentro de la estructura de puestos de trabajo en base a los procedimientos de provisión. Los procedimientos que son necesarios para ascender son de concurso, de libre designación u otros que tienen que ver con la movilidad voluntaria del funcionario.

La promoción interna horizontal es aquella que consiste en el acceso a cuerpos dentro del mismo Subgrupo profesional. Esta promoción está regulada de acuerdo al artículo 18 del Estatuto.

Finalmente, la promoción interna vertical. Este tipo de promoción es la que se produce desde un cuerpo o escala de un subgrupo a otro superior. También se puede dar dentro de un grupo de clasificación profesional en el supuesto de que no exista un subgrupo superior teniendo en cuenta el artículo 18 del Estatuto. Los requisitos necesarios para esta promoción interna se realizarán mediante procesos selectivos para garantizar el cumplimiento de los principios constitucionales.

¿Merece la pena la promoción interna del funcionariado?

Muchas personas cuando terminan por conseguir su plaza de funcionario no quieren saber nada más de estudios. Cuando se lleva a cabo una promoción interna lo más habitual es que se tengan que enfrentar de nuevo a un ejercicio de oposición. Esto es algo habitual, sobre todo porque existen muchos más candidatos para acceder al nuevo puesto de trabajo que funcionarios que lo dejan vacante.

Superar de nuevo una oposición es ya una cuestión de preferencias personales. Las preferencias y la situación de cada persona será la que pueda juzgar si realmente merece la pena la promoción. Por otro lado, la promoción interna es algo que siempre va a estar ahí. Siempre y cuando se cumplan los requisitos necesarios para poder optar a ella se podrá intentar.

Con el paso del tiempo y con la adquisición de experiencia también será bastante más sencillo lograrla. Además de esto, en el caso de que sean necesarios determinados méritos o si la experiencia es determinante resultará mucho más sencillo el ascenso. Otro aspecto que merece la pena valorar es si las nuevas responsabilidades del nuevo puesto de trabajo interesan al funcionario

Una vez más, esto se trata de una cuestión personal. Hay personas que prefieren cobrar algo menos y tener un puesto de trabajo más tranquilo, con menos responsabilidad o menos carga de trabajo, mientras que otras valoran el sueldo por encima del resto.

La mejor forma de poder valorar si merece la pena optar a la promoción interna o no es tratar de comparar el nuevo puesto con el antiguo.

Conocer las ventajas que supone la promoción interna para un funcionario puede ayudar a valorar mejor la situación. Elabora una lista de ventajas e inconvenientes que supondrá el cambio en el puesto de trabajo y podrás valorar mejor si te merece la pena optar a la promoción interna o dejarlo para más adelante.

Ventajas de la promoción interna para funcionarios

Una de las principales ventajas que tiene la promoción interna para un funcionario es el acceder a un sueldo superior. La promoción interna es una ventaja del funcionariado, ya que permite al propio funcionario mejorar su puesto de trabajo en base a esta promoción. Dependiendo del puesto del funcionario las condiciones podrán variar ostensiblemente.

Otra de las ventajas que tiene esta promoción interna para los funcionarios es que son ellos mismos los que pueden optar a ello. A diferencia de una empresa privada en donde básicamente una promoción se lleva a cabo mediante la designación de la dirección, en el funcionariado es el propio funcionario quien puede dar el paso hacia delante siempre y cuando cumpla los requisitos necesarios.

Esto le permite al funcionario medir mucho mejor los tiempos de cara a valorar para presentarse a dicha promoción. Tal vez ahora no sea un buen momento para la promoción, pero dentro de unos años cambies de idea, siempre podrás valorarlo.

Por supuesto, optar a una promoción interna puede ser muy bueno para la moral del funcionario. La autorrealización dentro del puesto de trabajo o tener la certeza de que realmente se encuentra capacitado para ostentar un puesto superior es algo bastante importante.

La promoción interna, en parte, también permite al funcionario cambiar de trabajo. Si se encuentra aburrido de su trabajo y busca nuevas responsabilidades u oportunidades, una promoción interna le puede servir al funcionario para dar una vuelta de hoja a su trabajo.

Otra ventaja que tiene la promoción interna es poder mejorar las condiciones de trabajo. Cuando se trata de un puesto superior, este suele tener mejores condiciones. Ya no solo hablamos de un salario más elevado, sino que también puede contar con un nuevo horario, otro destino u otras condiciones diferentes en relación al puesto de trabajo.

En definitiva, la promoción interna es una de las ventajas con las que cuentan los funcionarios para que estos no se queden estancados en su puesto de trabajo. Si así lo quieren, con tiempo y dedicación tendrán la oportunidad de promocionar en su puesto de trabajo con las ventajas que eso supone.